«Después de una de las peores temporadas en la historia de los huracanes en el Atlántico, las compañías aseguradoras más grandes del mundo dicen que el sector debe organizarse si quiere sobrevivir al cambio climático.

Tomar seguros contra desastres naturales climáticos podría alcanzar niveles prohibitivos para los hogares y las compañías, en la medida que los daños potenciales son tan impredecibles que modelarlos puede resultar imposible, un riesgo inaceptable para las compañías de seguros.

 “En algún momento futuro se dará una situación en que la gente no podrá permitirse comprar un seguro contra catástrofes… eso es lo que queremos evitar”, dijo Ernst Rauch, responsable del Corporate Climate Centre de Munich Re. La compañía reaseguradora más grande del mundo sufrió una pérdida de 1.400 millones de euros (US$1.630 millones) cuando los huracanes Harvey, Irma y María hicieron subir los reclamos.

Contrariamente a la visión de Warren Buffett de que el cambio climático impulsará la demanda de cobertura y elevará las ganancias de sus compañías de seguros, se está dando el riesgo opuesto en tanto los patrones climáticos cambiantes hacen que sea imposible asegurar las zonas propensas a desastres. Encontrar maneras de evitar que esto ocurra figura en el orden del día de las negociaciones sobre clima patrocinadas por Naciones Unidas en Bonn, Alemania, esta semana.

 La responsabilidad de soportar el gasto de reconstrucción después de los huracanes, las inundaciones y los terremotos ya recae de manera desproporcionada sobre los gobiernos.

Las compañías de seguros sólo responden por un 10 por ciento de los daños por US$75.000 millones que causó la inundación en Texas después del huracán Harvey, según AIR Worldwide. Esto se debe a que las pólizas de seguros para el hogar estadounidenses más estándar no cubren las inundaciones que sí cubre la mayoría de las pólizas. Se da una situación similar en Fiyi, castigado el año pasado por el peor ciclón en su historia, donde menos de una de cada diez personas tiene seguro.

 “Es una gran preocupación de Swiss Re que haya semejante brecha entre las pérdidas económicas y lo que está asegurado”, dijo Peter Zimmerli, responsable de riesgos atmosféricos de Swiss Re, la segunda compañía reaseguradora más grande. “Algunas de las señales del calentamiento global ya se están dando… no se pueden discutir”.»

Fuente: El Pulso, 13/11/2017 (enlace).